Los neumáticos que se instalan en los vehículos eléctricos (VE) soportan un peso superior a los de los automóviles de combustión convencionales, por lo que han de fabricarse con materiales y características específicas que permitan mejorar tanto el agarre como la eficiencia.

Aunque los vehículos eléctricos aún representan una minoría en nuestro país, ya son más de 400.000 conductores los que utilizan este tipo de movilidad para hacer que sus desplazamientos sean más sostenibles. Sin embargo, España todavía está muy lejos de los 5´5 millones de VE en circulación que, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), tiene como objetivo para el próximo 2030.

Movilidad eléctrica en España cifras

Pero no, hoy no venimos a hablar como en anteriores artículos de la poca efectividad del MOVES III o de la indudable necesidad de seguir incentivando la renovación de nuestro envejecido parque automovilístico, sino que vamos a centrarnos en algo totalmente distinto.

En esta ocasión, hablaremos de uno de los componentes que forman parte de todos los vehículos y que la mayoría de conductores piensa que no difiere en absoluto cuando se trata de automóviles convencionales, pero que gracias a sus características especiales desempeña un papel crucial en el rendimiento y la eficiencia de los coches eléctricos: Los neumáticos.

¿Pensabas que los coches eléctricos montaban las mismas ruedas que los de combustión? Si tu respuesta es afirmativa, déjanos decirte que podrías estar equivocado ya que, al margen de lo que muchos usuarios creen y de acuerdo con la información que figura en el número 267 de la revista digital de la DGT, los vehículos electrificados han de instalar neumáticos específicos capaces de soportar el peso adicional que tienen las versiones eléctricas en comparación con el de modelos diésel o gasolina.

¿Sabías que un vehículo de combustión pesa hasta un 30% menos que uno eléctrico? Esta carga de más lo sufren directamente los neumáticos, único punto de contacto entre el vehículo y la carretera, por lo que las ruedas para un VE deben de proporcionar un agarre óptimo y lograr resistir el desgaste de la misma manera que lo hacen las convencionales.

Para que puedas comprender mejor de qué estamos hablando y conozcas la importancia que tienen ciertas operaciones de mantenimiento, en lo que respecta a la vida útil de los neumáticos de un coche eléctrico, vamos a contarte todo sobre estos componentes específicos para VE ¿Nos acompañas?

¿Por qué no son iguales a los montados en vehículos de combustión?

Como hemos comentado en la introducción, los coches eléctricos tienen características únicas que provocan un impacto directo en ciertos componentes, como por ejemplo los neumáticos. Uno de los principales factores que los diferencia de los modelos de combustión es que sus baterías son considerablemente pesadas, lo cual implica una carga adicional, una mayor inercia (debido al aumento de la masa en movimiento) e incrementa la distancia de frenado.

Para garantizar la seguridad de los ocupantes y otros usuarios de la vía, es crucial prestar especial atención al agarre de los neumáticos, el cuál juega un papel vital en situaciones de aceleración puesto que, en este tipo de automóviles, el par motor se transfiere de manera prácticamente instantánea a las ruedas.

Así pues, los neumáticos para vehículos eléctricos están diseñados con una tecnología más avanzada, cuyos principales objetivos son reducir el peso del componente, ofrecer una mayor rigidez (mediante la incorporación de una carcasa de doble cara) y garantizar que la estructura sea robusta, para lo cual se emplea un compuesto de goma totalmente distinto al empleado en los neumáticos convencionales diseñados para coches diésel o gasolina.

También son distintos los dibujos y patrones de evacuación de agua empleados en la fabricación de neumáticos para este tipo de vehículos, lo que permite un equilibrio óptimo en su desgaste y contribuye a incrementar la propia autonomía del VE, elevándola en más de un 7%.

Impacto del peso de las baterías en el desgaste de los neumáticos

La peculiaridad más evidente que distingue a los automóviles electrificados es su peso, con baterías que añaden un 30% más de carga en comparación con los de combustión. Este incremento no solo exige que los neumáticos sean más robustos, también plantea desafíos específicos, desde el agarre necesario para la seguridad hasta la gestión del ruido, donde el silencio se convierte en una característica distintiva de este tipo de vehículos.

La evolución de estos neumáticos no solo implica reforzar su estructura, también requiere de compuestos de goma diseñados específicamente para soportar el peso adicional y contribuir a la eficiencia del vehículo.

Pongámonos en situación para entender mejor todo esto. Teniendo en cuenta que las baterías de un coche eléctrico tienen un peso que ronda los 400 Kg, las cuatro ruedas de un Porsche Taycan Turbo S (con 761 CV, 1.050 Nm de par motor y una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos) llegan a soportar más de 2.300 Kg de peso, por lo que sus neumáticos han de proporcionar un agarre superior al de las gomas convencionales, donde el peso soportado ronda los 2.000 Kg.

Características de los neumáticos para coches eléctricos

Principales características de los neumáticos para vehículos eléctricos

Escoger los neumáticos adecuados si conduces un coche eléctrico es esencial si pretendes obtener una mayor eficiencia en términos de autonomía. Podríamos decir, con ello, que las características más destacables de los especiales para vehículos eléctricos son las mencionadas a continuación:

  1. Soportan un peso mayor: Los vehículos eléctricos pesan en torno a un 30% más que los de combustión.
  2. Mayor agarre: Desde frenadas eficientes hasta la aceleración instantánea, la exigencia sobre el neumático en un vehículo eléctrico es monumental, por lo que ha de contar con una estructura y un compuesto de goma único, capaz de ofrecer la máxima robustez y eficacia.
  3. Tecnología de fabricación avanzada: La evolución de los neumáticos para vehículos eléctricos va más allá de lo convencional. En búsqueda del ahorro en lo que al peso total del vehículo se refiere, se implementan diversas técnicas para aligerarlo e incorporan una carcasa de doble capa para incrementar la rigidez, superando así las configuraciones de simple capa presentes en los coches de combustión.
  4. Mejor respuesta ante condiciones climatológicas adversas: Los patrones de evacuación del agua en la banda de rodadura de este tipo de neumáticos han de responder especialmente a condiciones de lluvia intensa o asfalto mojado, garantizando un rendimiento óptimo sin comprometer la seguridad.
  5. Menor resistencia: Estos neumáticos están diseñados para reducir la resistencia a la rodadura y no solo cumplen con múltiples requisitos en lo que a su desgaste se refiere, sino que también contribuyen significativamente al aumento de la autonomía de los vehículos eléctricos, mejorando la rentabilidad por uso hasta un 7%.

Como habrás podido comprobar en líneas anteriores, los neumáticos para vehículos eléctricos no solo cumplen con exigencias técnicas, sino que además se convierten en impulsores clave de la movilidad sostenible y eficiente.

Baja resistencia a la rodadura

La eficiencia energética se convierte en una prioridad para los neumáticos para VE. El delicado equilibrio entre un buen agarre y una baja resistencia a la rodadura se traduce en la necesidad de compuestos de goma especiales. Desde materiales de baja resistencia hasta una estructura reforzada, estos neumáticos están diseñados para optimizar el rendimiento y contribuir a la autonomía del vehículo.

Dibujos especiales para reducir el ruido

La tranquilidad de circular con un vehículo eléctrico plantea un dilema único para los fabricantes de neumáticos específicos, pues ¿Sabías que el 70% del sonido emitido por un automóvil eléctrico proviene de la rodadura y no del motor? En respuesta a esto, los fabricantes se esfuerzan en desarrollar materiales y dibujos distintos de los convencionales para minimizar el ruido, asegurando que la experiencia a bordo sea agradable y silenciosa.

Mantenimiento y cuidados para las ruedas del coche eléctrico

Mantenimiento y cuidados específicos ¿Qué debes de tener en cuenta?

Los vehículos eléctricos traen consigo un cambio revolucionario en la movilidad, y los cuidados específicos para sus neumáticos juegan un papel vital para garantizar un rendimiento óptimo y una seguridad integral en la carretera. Ahora bien ¿Qué aspectos has de tener en cuenta en lo que respecta a su mantenimiento? A continuación, hablaremos en profundidad de todo lo relacionado con este asunto.

¿Cómo alargar su vida útil?

Si ya posees un coche eléctrico o tienes intención de comprar uno, es importante que tengas en cuenta las pautas que tendrás que seguir para reducir el desgaste de sus neumáticos y prolongar, con ello, la vida útil de los mismos ¿Sabías que llevando a cabo ciertas comprobaciones regulares podrás circular con las ruedas en buen estado durante más tiempo?

A continuación, y sin más demoras, repasaremos los consejos que te ayudarán a alargar la vida útil de los neumáticos de tu coche eléctrico ¡No te las pierdas!

  • Mantener una presión de inflado adecuada: El peso adicional que tienen las baterías de los VE requiere atención constante sobre la presión de los neumáticos. Un inflado preciso no solo mejora la eficiencia del combustible, también contribuye a un desgaste uniforme y prolonga su vida útil.
  • Realizar rotaciones regularmente: Esta es una práctica esencial para contrarrestar el desgaste desigual. Dado que este tipo de vehículos pueden tener un peso distribuido de manera diferente debido la tecnología que incorporan. La rotación regular asegura una resistencia uniforme y optimiza la durabilidad de los neumáticos.
  • Monitorizar continuamente el desgaste: Estar atento al desgaste de los neumáticos es clave. La tecnología EV (Electric Vehicle) implica características específicas en los neumáticos, y un monitoreo regular ayuda a identificar signos tempranos de desgaste anormal. Cambiarlos a tiempo mejora la seguridad en carretera y optimiza la eficiencia del vehículo.
  • Programar mantenimientos regulares: Establecer rutinas de mantenimiento periódicas es clave. Programar revisiones periódicas en un taller especializado en vehículos eléctricos garantizará que cualquier problema potencial se detecte y aborde a tiempo, manteniendo los neumáticos siempre en condiciones óptimas.

Teniendo en cuenta estas recomendaciones para prolongar la vida útil de este tipo de neumáticos, podrás aumentar la eficiencia de tu EV e incrementará la seguridad en nuestras carreteras ¿Conduces un coche de combustión? En este caso, y para prolongar su vida útil, te aconsejamos seguir estos consejos ¡Haz clic en el enlace anterior y descúbrelos!

¿Por qué es tan importante su alineación y equilibrado?

Al igual que sucede en los vehículos que equipan un motor de combustión en su mecánica, la alineación y el equilibrado de los neumáticos es fundamental si quieres prevenir un desgaste irregular y garantizar una conducción suave.

Un mantenimiento regular de la alineación y el equilibrado de los neumáticos no solo mejorará la eficiencia del combustible sino que también contribuirá mejorando la seguridad y estabilidad del cualquier vehículo eléctrico, sea del tipo que sea.

 

En caso de ser propietario de un vehículo electrificado ¿Tenías conocimiento de la necesidad de adquirir neumáticos específicos? ¿Te gustaría que hablásemos sobre otros componentes propios de los VE? Escríbenos tus inquietudes en el apartado de comentarios ¡Te esperamos!

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