El exceso de confianza y la rutina, provocan cambios en nuestra forma de conducir y muchos de estos cambios se convierten en errores, que si no se modifican pueden distorsionar la percepción de riesgo que tenemos sobre determinadas acciones al volante, que son más peligrosas de lo que en realidad creemos.
- No guardar la distancia de seguridad
- No respetar los pasos de peatones
- No señalizar nuestras maniobras
- Postura inadecuada al volante
- Distraerse mirando un accidente
- Circular por el carril central
- No mirar por los espejos retrovisores
- Frenar bruscamente
- Incorporarse bruscamente a la carretera
- Manipular el teléfono móvil, el GPS, el ordenador de abordo o la radio
- Tocar el claxon a modo de protesta
- Cambios continuos de carril
- No aumentar la separación en los túneles
- Desconocer la velocidad máxima en cada vía o tramo
- Subirse a los bordillos
- No revisar periódicamente el estado de los neumáticos
- Adelantar en marchas largas
- Apurar la reserva del depósito
- No colocar adecuadamente los triángulos
- Abusar del freno bajando una pendiente
Hoy queremos rescatar un interesante reportaje que publicó la DGT en su revista digital número 228 y en el que se reúnen los 20 errores más comunes en los conductores, que en el peor de los casos pueden terminar provocando un grave accidente. ¿Se nos han olvidado las normas o con el paso de los años vamos adquiriendo malos hábitos de manera inconsciente? ¿Recordamos todos los principios y reglas básicas que aprendimos para poder obtener el carnet de conducir? ¿Sería conveniente reciclar nuestros conocimientos periódicamente? A continuación, vamos a analizar los vicios más frecuentes entre los conductores, así como el riesgo que suponen cada uno de ellos y la forma correcta de proceder en cada caso.
1.- No guardar la distancia de seguridad
Respetar la distancia de seguridad es esencial para reducir el riesgo de alcance, ya que de lo contrario disminuye la distancia de frenado.
El consejo que propone la DGT para saber si mantenemos una distancia de seguridad adecuada, es buscar un punto de referencia y contar “mil-ciento uno, mil-ciento dos”, desde el momento en el que el coche que llevamos delante pase por ese punto. Si hemos terminado de contar y nuestro vehículo todavía no ha alcanzado ese punto, la distancia es correcta. En caso contrario, tendremos que aumentar la distancia de seguridad ya que ésta no será suficiente.
2.- No respetar los pasos de peatones
Si un conductor no es precavido al aproximarse a un paso de peatones, se puede producir un atropello debido a la confianza que los viandantes sienten al caminar por un lugar donde tienen prioridad de paso.
Como conductores, debemos respetar la prioridad del peatón. No obstante, como peatones también tenemos que asegurarnos, antes de cruzar, de que el conductor que se aproxima nos ha visto y está reduciendo su velocidad para detenerse.
3.- No señalizar nuestras maniobras
No utilizar los intermitentes adecuadamente puede suponer un riesgo de colisión con otros conductores, que ignoran nuestras intenciones al volante.
Las maniobras deben señalizarse siempre con antelación suficiente. Además, es imprescindible recordar y respetar la siguiente regla de seguridad: observar, señalizar y después, ejecutar.
4.- Postura inadecuada al volante
Las malas posturas al volante, no solo suponen un riesgo para el conductor ya que, en muchos casos, también influyen en nuestro tiempo de reacción.
Para saber cómo adoptar una postura correcta, os recomendamos leer nuestro post y ver la infografía que publicamos en este mismo blog hace algún tiempo.
5.- Distraerse mirando un accidente
La distracción de los conductores que se quedan mirando un accidente en carretera puede producir retenciones y, por tanto, nuevas colisiones por alcance. Hay que mantener siempre la mirada en el sentido de la circulación y estar atento a los espejos retrovisores. Si las autoridades y los servicios sanitarios ya están haciendo su trabajo, lo peor que podemos hacer es entorpecerlo.
Si queréis saber más sobre cómo afectan en nuestro tiempo de reacción, determinadas acciones que realizamos al conducir, os recomendamos leer nuestro post: Consejos para evitar las distracciones al volante.
6.- Circular por el carril central
Circular por el carril central suele ser un acto propio de conductores inseguros. Además, puede inducir a maniobras incorrectas de oros conductores como adelantamientos por la derecha o dobles cambios de carril, con peligro de colisión o alcance.
En vías con más de un carril, debemos circular siempre por el de la derecha y utilizar los siguiente, únicamente para realizar maniobras de adelantamiento.
7.- No mirar por los espejos retrovisores
Olvidarse de mirar por los espejos retrovisores o no hacerlo en el momento adecuado, puede provocar colisiones al realizar giros o cambios de carril.
Es conveniente, cada vez que nos subimos a un vehículo, comprobar y ajustar la posición de los retrovisores. También debemos mirarlos antes de realizar cualquier maniobra y controlar los puntos muertos.
8.- Frenar bruscamente
Las frenadas bruscas son muy peligrosas ya que pueden producir alcances, el bloqueo de las ruedas e incluso una salida de la vía.
La DGT, en este sentido, recomienda conducir manteniendo la atención, guardando las distancias de seguridad, anticiparse a cualquier peligro y advertir la detención con las luces de emergencia de nuestro vehículo.
Si queréis saber cómo mantener en buen estado el sistema de frenos de vuestro vehículo, podéis revisar estos 5 consejos útiles que tenemos publicados en nuestro blog
9.- Incorporarse bruscamente a la carretera
Las incorporaciones bruscas suponen un peligro de colisión para aquellos vehículos que ya circulan por la vía principal.
Para evitar esto, debemos evaluar la posición, trayectoria y velocidad de los vehículos que circulan por la vía preferente, para poder acelerar e intercalarnos entre ellos. Además, cuando circulemos por la vía principal, en la medida de lo posible, tendremos que facilitar la incorporación. También es importante recordar en este punto, que poner el intermitente no nos otorga ningún tipo de preferencia a la hora de incorporarnos a cualquier vía.
10.- Manipular el teléfono móvil, el GPS, el ordenador de abordo o la radio
Ya se ha hablado en numerosas ocasiones de lo peligroso que es manipular cualquiera de estos dispositivos durante la conducción, pues se produce una distracción que desvía nuestra mirada de la carretera mientras recorremos los metros suficientes como para no ver una curva, un coche frenando por delante de nosotros, un semáforo poniéndose en rojo o a un peatón que está cruzando.
Debemos mantener siempre nuestra propia libertad de movimientos, el campo de visión necesario, una atención a la conducción permanente y una postura adecuada al volante.
11.- Tocar el claxon a modo de protesta
Pitar con el coche o hacer ráfagas con las luces de largo alcance a modo de protesta por los actos de otros conductores, puede producir sobresaltos, nervios o el bloqueo de la persona que no está circulando como debe, haciendo que empeore la situación debido a una reacción inesperada.
En la medida de lo posible y por nuestra propia seguridad, es preferible facilitar las maniobras de otros conductores, ser amables y educados al volante.
12.- Cambios continuos de carril
Los continuos cambios de carril y la conducción agresiva, originan frenazos, alcances y colisiones laterales. Cuando la circulación sea densa, deberemos elegir el carril en función de nuestro destino y permanecer en el mismo.
13.- No aumentar la separación en los túneles
No incrementar la separación con el vehículo que nos precede mientras circulamos por un túnel, hace que exista un riesgo superior de alcances y una mayor gravedad en caso de accidente, debido a las dificultades de acceso que tendrán los servicios de emergencia.
Lo correcto es mantener una distancia de seguridad de, al menos, 100 metros o un intervalo de 4 segundos. Si se trata de vehículos de más de 3.500 Kg, aumentar hasta los 150 metros o 6 segundos. Además, habrá que circular siempre con el alumbrado de cruce.
14.- Desconocer la velocidad máxima en cada vía o tramo
Circular por encima de los límites de velocidad, además se suponer una multa, también aumenta el riesgo de accidente.
Los límites de velocidad genéricos dependen del tipo de vía, pero también del tipo de vehículo. Para hacer un repaso de cuáles son éstos límites, os aconsejamos revisar la siguiente imagen:
15.- Subirse a los bordillos
Se pueden producir pérdidas de aire en los neumáticos, el conocido “llantazo” o deformaciones en la rueda que alteran peligrosamente la geometría de la dirección. Para evitarlo, al aparcar, tendremos que evitar que las ruedas golpeen en el bordillo o que se queden parcialmente subidas a él.
Este hecho, también forma parte de los 12 vicios al volante que publicamos hace algún tiempo en nuestro blog y donde también podréis ver otros malos hábitos de los conductores que comprometen el buen funcionamiento del vehículo.
16.- No revisar periódicamente el estado de los neumáticos
Si un vehículo circula con los neumáticos desgastados, con una presión inadecuada, o con la goma deteriorada, la distancia de frenado aumenta. Además, en caso de lluvia hay más riesgo de que se produzca aquaplaning e incluso podría producirse un reventón.
Para evitar esto, se aconseja revisar periódicamente el estado y la presión de los neumáticos. De esta forma, podremos detectar con antelación si existen malformaciones, la goma está en mal estado o se ha producido un desgaste irregular.
17.- Adelantar en marchas largas
En vías de un solo carril por sentido, existe riesgo de colisión si la maniobra se inicia a una velocidad baja. Además, en vías de más un carril para cada sentido, se puede entorpecer la circulación del resto de conductores, si el adelantamiento no se realiza adecuadamente.
Se aconseja siempre, a la hora de realizar un adelantamiento, elegir lugares adecuados y con buena visibilidad. La marcha y la velocidad, deberán ser acordes con la pendiente y el trazado de la vía. El adelantamiento debe realizarse siempre con decisión y utilizando siempre los intermitentes para indicar la maniobra al resto de conductores.
18.- Apurar la reserva del depósito
Apurar el combustible del depósito puede producir una mayor absorción de las impurezas del mismo y a su paso por el sistema de inyección, puede provocar averías. Además, circular apurando la reserva puede hacer que nos quedemos tirados en el lugar y momento menos oportunos, suponiendo un riesgo y un obstáculo para la circulación.
Para evitar que esto pase, se aconseja rellenar el depósito antes de que llegue a la reserva y viajar con el depósito lleno en desplazamientos largos.
19.- No colocar adecuadamente los triángulos
No colocar de forma correcta los triángulos aumenta el riesgo de accidente, ya que el resto de conductores no podrán advertir tan fácilmente la presencia de un vehículo parado en el margen de la vía.
En carreteras de doble sentido, hay que situar un triángulo 50 metros por delante del vehículo y otro, 50 metros por detrás. De esta forma se facilita que seamos vistos desde una distancia de al menos 100 metros. En vías de un solo sentido, tendremos que colocar un solo triángulo 50 metros por detrás de nuestro vehículo.
20.- Abusar del freno bajando una pendiente
Esta acción puede provocar un accidente ya que, lanzar el coche cuesta abajo, obliga a frenar a fondo en las curvas, provocando el calentamiento de los frenos y una pérdida de rendimiento.
Para evitarlo, la DGT recomienda aplicar la vieja regla de baja un puerto en la misma marcha que lo subirías, sin permitir que el vehículo se lance. Si notamos dureza en el pedal de freno y un rendimiento poco óptimo, tendremos que utilizar marchas más cortas que os ayuden a retener el coche y levantar momentáneamente el pie del pedal de freno para refrigerar discos y pastillas.
Y vosotros… ¿Os habéis sentido identificados con alguno de los errores mencionados en esta lista? ¿Creéis que son demasiados los conductores que los cometen de forma inconsciente? ¿Qué otros vicios añadiríais a la lista? ¡Dejadnos vuestros comentarios!
La verdad es cuando te estás sacando el carnet, te das cuenta de que muchos conductores no siguen muchas pautas. Es como si solo importaran para el examen. Muy mal.
¡Totalmente de acuerdo!
Nosotros destacamos especialmente el error de confiarse en la carretera. Si bien es cierto que una persona puede contar con grandes habilidades para circular correctamente y sin problemas, nunca aconsejamos relajarse. Sobre todo cuando se trata de coches compartidos, donde varios usuarios dependen del mismo vehículo o conductor.
Excelente me sirve por que recien avabo de obtener mi permiso
En el punto «2» – RESPETAR EL PASO DE PEATONES), en el segundo párrafo dicen que el peatón debe asegurarse de que el conductor ha visto con tiempo que quiere cruzar, cosa que muy contados peatones hacen. Me he encontrado casos que el
peaton se ha metido en el paso cuando yo estaba dentro del paso y encima me ha abroncado, cosa que te cabrea y que puede tener consecuencias porque a partir de este momento te puede subir una cierta agresividad. Yo abogo para que todos los pasos de pestones tengan su semáforo y de ésta manera no tengan siempre la culpa de los atropellos los conductores. Ya sé que esta
medida resultaria a los Ayuntamientos muy cara, pero se podría superar bajando los salarios desorbitados a los alcaldes y concejales. Alcaldes y concejales que en las campañas electorales venden al votante que» todo lo hacen para el pueblo», pero no dicen que «sin el pueblo». De esta manera los pocos que se presentarian para cargos públicos serian de verdad gente dedicada al bien del pueblo.
Un saludo de un conductor que está muy quemado con los «todopoderosos peatones.
Perfecto, pero com prodiamos meteterlo en la cabeza de los conductores, no se podria preparar algo a traves de TV,?
Hola Lorenzo buenos días,
Ojalá pudiéramos, pero nuestra empresa no cuenta con el presupuesto necesario para anunciarse en TV.
Quizás sea un trabajo que le corresponde a la DGT, más que a una empresa privada que funciona como una central de desguaces.
Un saludo,
EXCELENTE ENCUESTA. GRACIAS X DIFUNDIR ESTE CATAALADO, ME ES MUY UTIL-