En RO-DES siempre nos mueven las inquietudes medioambientales y la máxima de la ecología se basa en la reutilización de los elementos que puedan seguir siendo aprovechados antes de ser reciclados, tal y como hemos visto en anteriores ediciones de Tu vehículo puede acabar en el desguace o…
Hoy vamos a hablar de una actitud con un enfoque ecológico de doble impacto: se trata de bicicletas hechas a partir de piezas de coches de desguace. En ellas, no sólo destaca el beneficiarse del metal que se desecha de los automóviles considerados como fuera de uso (VFU), sino que además llevan un mensaje más verde dentro: el cambiar un medio de transporte contaminante por uno respetuoso con el medio ambiente.
Para ver estas algunas de estas bicicletas tan exclusivas, ya que no hay dos iguales, os acercamos al taller de la plataforma Lola Hace, donde el proceso de transformación de un coche en una “Bicycled “es totalmente artesanal, ayudando a impulsar oficios que están desapareciendo.
Se reutilizan diversos elementos cuidando todo tipo de detalle: desde el cuadro y la cadena, hasta el sillín o la luz de posición, que provienen del chasis, la correa de distribución, la tapicería de los asientos y los intermitentes, respectivamente. Además, debido al interés que han suscitado, ya se han recibido algunos pedidos y el precio final de cada una de estas originales bicicletas se calculará en función de la cantidad de unidades a elaborar.
Y de Madrid, nos vamos a Lisboa para seguir reciclando bicicletas por un mundo mejor. La iniciativa que ha comenzado allí Leo Burnett es bastante parecida aunque no tiene un fin tan estético en sí mismo, puesto que la idea no es comercializar este prototipo. El Proyecto Carma intenta redimir a un Mercedes Benz que acabó sus días con casi 160.000 km. a sus espaldas. Ahora la propuesta es que los elementos reciclados y convertidos en bicicleta de ese Mercedes dorado repitan la hazaña de cumplir con la misma cantidad de kilómetros efectuados.
Al cargo de la elaboración quedó el taller especializado Rcicla bicicletas, y su misión consistía en usan el mayor número de componentes posibles del automóvil, moldeando y aprovechándolo al máximo, además de cuidar tanto los detalles como lo hacen en Bicycled, como hemos comentado antes, llegando incluso forrando el manillar con textil del techo.
¿Recorrerá los kilómetros suficientes para limpiar el “karma” que emitió a la atmósfera? ¿Os gustaría pasear en una “Bicycled”? ¿Conoces otras iniciativas similares? ¡Déjanos tu comentario!