La llegada del otoño, en muchos lugares, suele ser sinónimo de tormentas repentinas y mal tiempo, o de lo que comúnmente conocemos aquí como “la gota fría”.
- ¿Qué hacer si estás conduciendo en ese momento?
- Pautas para conductores que se encuentren ante una riada
Este fenómeno meteorológico que se desarrolla de manera muy rápida, suele ser el detonante de imprevistas crecidas del cauce de los ríos que discurren próximos a diversos municipios de nuestra geografía y producen importantes inundaciones.
¿Qué hacer si estás conduciendo en ese momento?
Tal y como recoge la DGT en un reportaje publicado en su revista digital, hay varias pautas y recomendaciones a seguir cuando nos encontremos al volante de nuestro coche y debamos enfrentarnos a condiciones meteorológicas adversas que puedan producir grandes acumulaciones de agua en la carretera.
Ante todo, es importante conocer la previsión del tiempo y adaptarse a las posibles inclemencias evitando conducir, o en caso de tener que hacerlo que sea utilizando vías principales y no carreteras secundarias o caminos, ya que en muchas ocasiones se cruzan con torrentes secos que se inundan con facilidad cuando hay fuertes lluvias.
Además, no debemos fiarnos de la percepción que tengamos del nivel del agua ya que pueden haberse producido socavones que aumentarían la profundidad. Por lo general, empezaremos a perder el control del vehículo con una profundidad de entre 35 y 40 centímetros, mientras que a partir de los 60 centímetros nuestro vehículo ya empezaría a ser arrastrado por la corriente de agua. Si no estamos seguros, lo mejor es abandonar lo antes posible el vehículo.
A continuación os dejamos la infografía que se ha publicado en la web de la DGT sobre cómo afecta la corriente a la estabilidad de un vehículo:
Pautas para conductores que se encuentren ante una riada
Mantener la calma y ser cauto, son las principales pautas a seguir si cuando estamos conduciendo nos encontramos ante una riada o carretera anegada. No obstante, la Dirección General de Tráfico ofrece también las siguientes recomendaciones de utilidad:
- Si se desconoce el camino exacto para llegar al destino, se desaconseja totalmente cruzar una carretera anegada. Es mejor buscar una vía principal alternativa o llamar al 112 para solicitar información.
- Hay que tener en cuenta que bajo el agua pueden haber sedimentos, árboles arrancados, desprendimientos e incluso hundimientos de suelo.
- Si el agua supera los ejes de las ruedas o los bajos y se empieza a perder el control del vehículo, lo mejor es abandonarlo.
- Si resulta imposible abrir la puerta por la presión, hay que valorar la opción de salir por la ventanilla. En caso de no poder bajarla, se puede utilizar cualquier objeto contundente para romperla.
- Al salir del coche, se hará por el lado contrario a la corriente. Se debe nadar hasta una zona segura o bien subirse al techo si el vehículo se encuentra parado.
- Nunca hay que nadar contracorriente, sino a favor de la misma y siempre dirigiendo nuestro rumbo hacia una orilla, árbol u elemento seguro que nos permita agarrarnos.
Además, también conviene tener en cuenta los consejos que anteriormente hemos publicado ya en nuestro blog para conducir con lluvia o para evitar el efecto de aquaplaning.
¿Alguna vez os habéis encontrado ante una situación similar? ¿Cómo la habéis afrontado? ¿Qué otros consejos daríais a nuestros lectores? ¡Dejadnos vuestros comentarios!
Imagen @ Flickr Artrista Fundamentá
Excelentes recomendaciones que nunca viene mal saber; siempre me he preguntado por qué estas cosas no se estudian en una autoescuela.
Otra recomendación que también se podría hacer al margen de la seguridad es que si vamos circulando por una zona inundada y de repente el motor de nuestro coche se para, no tratemos de insistir para volverlo a arrancar, ya que es posible que haya entrado agua en el sistema de aire y con ello lo único que estemos provocando es que entre más agua dentro del motor (bueno, no se si me he explicado bien, pero ya he visto un par de casos, jejeje)
Un saludo.
Hola Álvaro buenos días,
Te has explicado perfectamente y creo que es una muy buena recomendación a tener en cuenta también. Además, a la hora de querer conservar el vehículo puede que sea la más importante, tengo un par de casos cercanos y el no encender el motor una vez éste se había parado, sin duda marcó la diferencia. En caso contrario, esos coches habrían acabado en el desguace seguramente.
Saludos cordiales y gracias por la visita 😉