Los radares para medir y sancionar los excesos de ruido de los coches u otros vehículos llegarán a España en 2022 ¿A partir de cuántos decibelios sancionarán? ¿De cuánto es la multa si te pillan?
El ruido generado por los coches debe ser considerado como un agente contaminante más, tanto del medio urbano como del rural; pues es uno de los factores que se puede considerar nocivo para la salud de las personas o el medio ambiente. Por ello, y para reducir los niveles de contaminación sonora en las ciudades, los radares de ruido para vehículos podrían estar más cerca de lo que nos pensamos.
¿Qué es un radar de ruido y cómo funciona?
Según la descripción realizada por Diariomotor en su artículo, un radar de ruido es un dispositivo equipado con un decibelímetro, el cual mide la intensidad del sonido y puede identificar la fuente de la que procede.
Estos radares están formados por una cámaras de 360 grados, incluyen cuatro micrófonos capaces de medir los decibelios y distintas antenas acústicas que le permiten identificar el origen o la dirección desde la que procede el ruido.
Su principal función en este caso sería medir el sonido producido por los vehículos e identificar de qué automóvil proceden los registros que superan el máximo establecido. De esta manera, si sistema percibe que el ruido es excesivo al pasar el vehículo por alguno de los puntos de la cámara, se tomaría una fotografía del coche en la que se viera reflejada su matrícula para, después, emitir de forma automática la sanción.
Se han de tener en cuenta los ruidos máximos permitidos, pues la normativa europea establece como contaminantes todos aquellos ruidos que superen los 55 decibelios (dB) durante el día y los 50 dB durante la noche.
¿Por qué se instalan los radares de ruido?
Muchos usuarios viven en una ubicación donde pasan muchos coches a todas horas del día, sometiéndose a un constante ruido. Este es un problema derivado por el tráfico en carreteras.
La Organización Mundial de Salud alerta de los riesgos de la contaminación acústica y de los problemas que puede generar en la salud, pues ya existen evidencias de que afecta al metabolismo y está conectada con enfermedades de tipo cardiovascular.
Los radares de ruido para coches ¿Llegarán a instalarse en España?
España pretende crear una estrategia para reducir el ruido y ya se está estudiando en distintos puntos del país la manera en la que se implementarán este tipo de radares a las principales vías afectadas por la contaminación acústica.
Además, también se está haciendo uso de las tecnologías que ya se encuentran instaladas en nuestras carreteras, pues aunque los radares convencionales están pensados para registrar los excesos de velocidad, también actúan como barrera al provocar la reducción de velocidad a la que circulan los vehículos, por lo que también son útiles a la hora de reducir las emisiones acústicas producidas por los medios de transporte terrestres.
Este sería uno de los motivos adicionales por los que el Gobierno y la DGT pretenden aumentar el número de radares fijos y de tramo en nuestras carreteras. De hecho, el Servei Catalá de Tránsit ya tuvo en cuenta los factores de contaminación acústica en 2019, cuando realizó la instalación de los nuevos radares de tramo.
¿Habrá radares de ruido en España? El apartado 1 del artículo 10 del proyecto de reforma de la Ley sobre Tráfico y Seguridad apunta que si:
Apartado 1 del artículo 10 del Proyecto de reforma de la Ley sobre Tráfico y Seguridad Vial: 1. El usuario de la vía está obligado a comportarse de forma que no entorpezca indebidamente la circulación, ni cause peligro, perjuicios o molestias innecesarias a las personas o daños a los bienes o al medioambiente.
Gijón y Vitoria: Las primeras ciudades españolas
Según la información aportada en el artículo publicado por Autopista.es, la Comisión de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Gijón debatirá próximamente la compra de radares de ruido para, además de vigilar la contaminación acústica de los vehículos, controlar también el ruido de bares, restaurantes y obras.
Además, Vitoria podría postularse como la primera ciudad española en instalar radares de ruido para los coches y el grupo municipal Elkarrekin Podemos ha reclamado que se incluya en la ciudad una experiencia piloto en 2022, que de inicio no tendría carácter sancionador. Una vez se probase su uso durante un año, se plantearía la emisión automática de sanciones a partir de 2023. En principio, estos radares de ruido para coches se ubicarían en zonas de alto tráfico y servirían especialmente para identificar a los vehículos de gran cilindrada que circulan con silenciadores trucados o con la música demasiado alta.