Seguro que muchos de vosotros sois seguidores del Mundial de Fórmula 1 y de las competiciones automovilísticas en general, pero ¿alguna vez os habéis preguntado cual es el coste aproximado de un coche de F1? Este tipo de vehículos, por su gran complejidad, tienen un valor de mercado que está al alcance de muy pocos y escuderías como HRT, Caterham o Lotus, se han visto afectadas precisamente por este motivo llegando incluso a tener que cancelar su participación en este popular deporte debido al elevado precio de las piezas y recambios que son necesarios para fabricar un coche de F1.
A continuación, y gracias a la información que hemos podido extraer de diversas fuentes que mencionaremos en una infografía al final de este post, vamos a descubrir qué precio tienen aproximadamente las principales piezas que emplean las escuderías en cada temporada para sacar a la pista sus coches de F1.
El motor:
El motor de un coche de F1, al igual que en un coche convencional, es una de las partes más importantes que forman parte del vehículo. Así, un motor completo de F1 puede llegar aproximadamente a los 214.300 dólares, por lo que una escudería puede llegar a gastar cerca de 4´7 millones de dólares si se tiene en cuenta que pueden utilizar hasta 8 motores por temporada y que por lo general, suelen tener al menos 2 monoplazas.
Se trata de una de las partes más complejas del vehículo, ya que el motor está formado por más de 1.000 piezas que tardan hasta 80 horas en ser ensambladas.
La caja de cambios:
La caja de cambios también es otro de los componentes más caros de un coche de F1 y las escuderías suelen invertir por cada unidad unos 128.600 dólares. Se trata de una caja de cambios muy precisa y rápida, siendo capaz de introducir hasta 2 marchas al mismo tiempo. En cada Gran Premio de F1 se pueden llegar a realizar más de 3.000 cambios de marcha.
El software de telemetría:
Este software es utilizado por los ingenieros para realizar un seguimiento de numerosas variables durante la carrera y en tiempo real. El precio por unidad es de unos 107.150 dólares, lo que lo convierte también en uno de los elementos más caros del monoplaza.
El tubo de escape:
Los tubos de escape que se emplean en los coches de F1 son fabricados en una aleación de inconel, capaz de soportar más de 1.000 oC de temperatura. Además, también influyen notablemente en la potencia del monoplaza y la inversión por temporada es de unos 255.620 dólares.
El chasis:
Actualmente, los chasis de los coches de F1 se fabrican en fibra de carbono debido a la alta resistencia de este material y a su ligereza. Además, se realizan a medida para cada piloto y tienen un coste aproximado por unidad de 117.900 dólares.
El fondo plano:
Este elemento es muy importante de cara a marcar la velocidad por vuelta de los pilotos de F1. Se fabrican de modo que puedan pegarse lo máximo posible al asfalto y haciendo que mejore notablemente la carga aerodinámica. Su coste por temporada suele rondar los 86.000 euros.
El volante:
Muchos de nosotros nos volveríamos locos si al subirnos a nuestro coche nos encontráramos un volante con tantos controles como los que lleva uno de F1. Además, los volantes de F1 tiene un display que permite al piloto conocer el estado del vehículo durante la carrera y su coste está muy próximo a los 30.000 dólares.
El alerón delantero:
Este alerón es ajustable dependiendo de la trazada de la pista y repercute en un 25% en la carga aerodinámica del coche. También es una de las piezas que más se rompe durante las carreras, aunque puede cambiarse muy rápidamente durante una parada en boxes. El presupuesto que cada escudería destina aproximadamente para este tipo de elemento es de unos 215.000 dólares por temporada, pues cada unidad puede costar alrededor de 21.500 dólares.
Alerón trasero:
El alerón trasero influye un 30% en la carga aerodinámica del monoplaza, aunque generalmente por su posición no recibe tantos impactos como el delantero y su vida útil suele ser más extensa. En cada temporada se puede llegar a realizar una inversión de hasta 129.000 dólares ya que cada unidad tiene un coste aproximado de 12.900 dólares.
Los frenos:
Debido a las elevadas velocidades que alcanzan los monoplazas de F1, los frenos de este tipo de vehículos son especiales ya que permiten que la velocidad se reduzca, en tan solo 100 metros, de 300 a 80 km/h. El gasto en frenos es próximo a los 207.000 dólares por temporada.
Las ruedas:
Las ruedas tienen un coste para las escuderías de casi 300.000 dólares. Normalmente se pueden encontrar de 3 tipos diferentes (blando, medio y duro) de modo que pueden adaptarse a las condiciones meteorológicas y de la pista, además de servir para las diferentes estrategias de carrera. El coste por unidad es de unos 650 dólares.
Para finalizar, os dejamos con esta infografía tan chula que, aunque está en inglés, sirve para entender a la perfección la inversión que realizan cada temporada las escuderías que forman parte del Mundial de Fórmula 1.
¡Pues sí que es una pasta! Pero claro, tampoco es como para sorprenderse. La potencia y la resistencia de estos coches, la presión a la que se someten sus piezas, tendrá detrás un trabajo de ingeniería alucinante. ¡Vaya máquinas! Muy interesante el artículo, me he encantado, gracias por compartir este tipo de análisis.
Saludos!
¡Madre mía, menudo pastizal! Lo del volante lo había visto en un reportaje, pero ignoraba lo del restante de piezas. Lo cual, confirma mi teoría de que el cáncer de la Fórmula 1 es precisamente el excesivo dinero que las escuderías invierten en hacer los monoplazas más veloces en vez de dejar que el mérito sea casi exclusivamente del piloto. Al final, es como ocurre con los niños, se divierten más con una simple y barata pelota en el parque que con una consola de última generación.
Un saludo 😉